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Plaza Pública

Libia ¿y después?

Libia

El papel de los Estados Unidos y de la OTAN en el conflicto de Libia comienza a tener matices de una confrontación que se prevé larga y compleja. ¿Alguien imaginó que Gadafi sería un simple espectador? Era de suponer que el régimen instaurado en Libia daría la batalla por defender sus ideales, acertados o no, ante la invasión del espacio aéreo de sus amigos (hoy enemigos) de occidente.

En Libia estamos siendo testigos de las consecuencias de las políticas internacionales basadas exclusivamente en los intereses económicos y estratégicos de los gobiernos de occidente. Regímenes como los de Libia supieron rentabilizar las necesidades económicas de sus aliados, mantener una red de contactos; amigos de conveniencia. En definitiva, los intereses de occidente están en donde se encuentran los recursos energéticos; el precio, poco importa.

Ahora bien, el lenguaje en contra de occidente de algunos líderes de la región es parte de un discurso político-religioso enfocado en mantener el sistema imperante. La negociación en temas de recursos energéticos es indispensable en el contexto actual de la geopolítica mundial. No seamos ingenuos, ambas partes conocen perfectamente los riesgos que implica la negociación con empresas multinacionales; en especial las dedicadas a los recursos energéticos.

Las relaciones de Europa, y del resto de los países, con las naciones del mundo árabe pasan por una etapa compleja de redefiniciones. ¿Qué se está dispuesto a tolerar en las relaciones económicas y políticas? ¿Cuáles serán los acuerdos políticos y económicos que surgirán después de esta revolución que se ha extendido por varios países de la región? ¿Cómo se gestionarán los otros conflictos con los países de occidente?

Por Víctor Manuel Pérez Martínez | victor@vmperezm.com

Experiencias colaborativas en la formación de estudiantes de periodismo: Press Writing I y Documentación

Comunicación presentada en el II Congreso Latina de Comunicación Social por los profesores Víctor Manuel Pérez-Martínez, Nerea Vadillo Bengoa y Joseph McMahon:

En el contexto del EEES, las metodologías utilizadas en el proceso de aprendizaje tienen como objetivo la evaluación de las competencias que los alumnos adquieren durante su proceso de formación. El desarrollo de estrategias que permitan la integración de objetivos docentes son esenciales para la construcción del conocimiento y la experiencia colaborativa de estudiantes y profesores. La actividad realizada evaluó las competencias en dos asignaturas relacionadas con el Grado de Periodismo (Press Writing I y Documentación Informativa).

El taller realizado en el aula incluyó una preparación previa, recursos audiovisuales (The Paper), debate en el aula (castellano e inglés) y el uso de recursos tecnológicos (Plataforma en línea) en la actividad autónoma del alumno. El análisis del proceso contempló la preparación, el desarrollo y la evaluación de la actividad desde un enfoque cualitativo y cuantitativo.

 

http://www.revistalatinacs.org/10SLCS/propuestas.html#84

¿Qué elegimos los venezolanos?

Asamblea NAcional

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

La sociedad venezolana demostró la madurez democrática en las recientes elecciones de los representantes a la Asamblea Nacional. Superar la presión mediática de la oposición y del oficialismo no fue una tarea fácil. Los ciudadanos ejercieron su derecho al voto y expresaron una opinión. Ahora bien, es lamentable que oposición y gobierno no escuchen o no quieran escuchar la voz de una sociedad que exige, menos discursos y más actuaciones eficaces.

No hay duda que los recursos del Estado fueron utilizados para defender la revolución. Los integrantes de los medios de comunicación públicos defendieron los ideales de la bolivarianos. Mantuvieron la imagen del líder en alto. No obstante, por mucho que quieran matizar los resultados desde el gobierno estos no fueron los deseados. Hugo Chávez no logró el objetivo y debe asumir que existe una opinión diferente en el país. Ni la revolución ha llegado a los sectores que pensaba ni su Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tiene la capacidad para captar a nuevos votantes. Aunque no es una elección presidencial hay que tener en cuenta que se estaba eligiendo una manera de hacer política. ¿No es la razón de ser PSUV?

En el otro extremo la oposición ya está organizando un posible referendum y una lista de candidatos presidenciales. Me pregunto: ¿Los ciudadanos votaron para quitar a Hugo Chávez del poder? Personalmente tengo mis dudas. Entiendo que los venezolanos elegimos a unos representantes a la Asamblea Nacional para tener una opción diferente en el Parlamento. Pero, ¿cuál es la propuesta de país que tiene la oposición? ¿Cuáles son los proyectos de leyes que llevaran a votación? Necesitamos una alternativa que pueda convencer a la mayoría de los venezolanos. Los objetivos se logran trabajando y demostrando que una Venezuela diferente es posible con un modelo distinto. Un país en dónde el poder del presidente está limitado por el Parlamento. Una sociedad en la cual el Estado de Derecho es fuerte.

Una nueva oportunidad se vislumbra para la sociedad venezolana. Los resultados de las elecciones deben ser analizados por los partidos políticos. No es la hora de confundir los datos y pretender asumir una representación que no se tiene. Los diputados solamente tienen una encomienda: legislar. Intentar que el Poder Legislativo sea autónomo e independiente. Poco importa quién sea el presidente. Quizás es el momento de poner límites y limitaciones al presidencialismo que tanto daño hace al país. En una frase: En Venezuela los gobiernos están sujetos a la voluntad del pueblo representado en el Parlamento.

Campus Virtuales 2010

En septiembre se realizarán las II Jornadas Internacionales de Campus Virtuales, Granada, 27-28 Septiembre.

El tema prin­ci­pal de este año será la in­ter­na­cio­na­li­za­ción, con­so­li­da­ción de redes de coope­ra­ción y la mo­vi­li­dad vir­tual como ejes es­tra­té­gi­cos en el marco del EEES y de co­la­bo­ra­ción con Amé­ri­ca La­ti­na.  Para ello se con­ta­rá con po­nen­tes y re­co­no­ci­do pres­ti­gio en estas áreas así como los re­sul­ta­dos de pro­yec­tos in­ter­na­cio­na­les fi­nan­cia­do por la Co­mi­sión Eu­ro­pea y en el que par­ti­ci­pan ins­ti­tu­cio­nes del ám­bi­to de la edu­ca­ción su­pe­rior eu­ro­peas y la­ti­noa­me­ri­ca­nas.

Más información en: http://campusvirtuales.es/2010/

CHAVEZ Y URIBE: UNA RELACIÓN PELIGROSA

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

Propongo una solución para los conflictos entre Álvaro Uribe y Hugo Chávez: dejarlos solos un par de días en un recinto de cinco metros cuadrados. ¿Un reality show? Las consecuencias no serían tan graves. ¿Existe otra opción? Lamentablemente la incompetencia de ambos gobiernos para solucionar sus problemas en encuentros bilaterales es inviable. Los problemas personales entre ambos mandatarios (no veo otra razón)  están traduciéndose en una psicosis de guerra en la cual, excepto que alguien demuestre lo contrario, ni venezolanos ni colombianos estamos interesados. ¿Quizás ellos si lo estén para distraer la atención? Pero a los ciudadanos: NO.

Entre otros aspectos porque, ¿cuáles son los motivos de un enfrentamiento militar entre ambos países? No hay ningún territorio en disputa, ni riquezas minerales en peligro, ni tampoco un ataque bélico frontal para eliminar a un gobierno y mucho menos enemistad entre ambos pueblos. La única causa del enfrentamiento, al menos visible, está vinculada a la FARC.

Poco interés tienen los venezolanos y los colombianos de proteger y preocuparse por unos guerrilleros. No tengo la certeza que los más fieles a Hugo Chávez sean capaces de entregarse a las armas por un movimiento insurgente y terrorista que ha causado mucho daño a la sociedad colombiana. Aunque, en la nueva religión chavista la adoración a los personajes de la izquierda revolucionara puede incentivar sentimientos poco deseados. Estos personajes son parte de un santoral propio y de un ritual incentivado por el gobierno venezolano. Es suficiente con recordar la transmisión religiosa-ideológica-demagógica realizada por Hugo Chávez de la exhumación de los restos de Simón Bolívar.

Una de las pocas metas incumplidas del presidente venezolano es participar activamente (pero debidamente custodiado) en un conflicto bélico. En su curriculum está una intentona fallida de golpe de Estado, una renuncia a su cargo de Presidente y ver como la propia Fuerza Armada lo restituyó en el poder después de evitar el golpe de Carmona Estanga. Militarmente poco tiene que ofrecer en comparación a los héroes revolucionarios de América. Pero, ¿por qué no juega a la guerra con una PlayStation? ¿Por qué no se preocupa en gobernar a un país que requiere mayor dedicación, atención y gerencia? ¿Tiene que distraernos de los problemas con su ilusión de ser el nuevo Simón Bolívar de Venezuela? No es la Venezuela del Libertador. Simón Bolívar murió. Dejó un legado muy importante de principios; pero, es una inmoralidad que sean manipulados por los intereses políticos y económicos de la clase política; la de los actuales momentos y la de décadas anteriores.

La preocupación de usar la guerra y el conflicto como discurso político, es que hay sectores de la sociedad que asumen los mensajes de sus líderes como verdades irrefutables.

¿UBUNTU EN SUDÁFRICA 2010?

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

Ubuntu, además de ser el nombre del sistema operativo de código abierto basado en Linux, es una expresión que hace referencia a una filosofía de vida en la cual “soy porque nosotros somos”. Apela a la solidaridad, a la unidad y a la disposición por construir un mundo mejor.

Sudáfrica es uno de los focos de atención mediático en la actualidad. Es noticia por el Mundial de Fútbol 2010; el primero que se realiza en el continente africano. No se discute la conveniencia del evento para el continente porque le permite proyectar al mundo una imagen distinta. En el caso de Sudáfrica fue un éxito no sólo deportivo sino un logro político y personal de Nelson Mandela. La candidatura requería de la voluntad política por equipar al país de una infraestructura deportiva y logística capaz de estar a la altura de los mundiales de fútbol más recientes.

En un país donde el apartheid causó grabes problemas sociales, con una democracia muy reciente (1994), con altos índices de pobreza y de delincuencia, con problemas estructurales en sanidad, educación y servicios públicos; el mundial, ¿es una oportunidad para cambiar la otra Sudáfrica que no aparece en los medios de comunicación?

La nueva etapa política de Sudáfrica ha estado orientada por un mensaje de reconciliación; la filosofía Ubuntu. Fue la Comisión de la Verdad y de la Reconciliación un paso importante para la reconstrucción del país. Desmond Tutu presidió la comisión (1995-1998) y se encargó de investigar los delitos en contra de los derechos humanos ocurridos durante el apartheid. Sin embargo, las consecuencias sociales y políticas siguen estando vigentes.

Aunque Sudáfrica es una de las regiones con mejor economía de África, está muy lejos de ser la imagen que con esmero han intentado transmitir. Países poderosos han mirado hacia África para explotar sus recursos naturales; pero, no para invertir en su desarrollo. No es un cambio de imagen lo que necesita el continente. Es necesaria la voluntad política de los gobiernos internos y de la comunidad internacional para hacer de África una región con una mejor y mayor calidad de vida.

¿Petróleo o Socialismo?

Por Víctor Manuel Pérez Martínez
victor@vmperezm.com

El socialismo aspira a ser un modelo político que ofrece una serie de valores para optar a una sociedad más justa. Los principios de los teóricos socialistas son ampliamente debatidos. La mayoría de los ciudadanos aspiramos a vivir en una sociedad en la cual tengamos los servicios públicos garantizados, una mejor calidad de vida, en donde la pobreza disminuya y las personas puedan lograr sus objetivos en la vida.

Algunas corporaciones miden sus éxitos por el superávit al final de un período económico mientras que paralelamente el gobierno se considera exitoso por imponer su ideología. En ambos casos, generalmente no se miden las consecuencias. La libre empresa en una sociedad democrática, que se autodefine socialista, debe responder a un marco legal y a un estado de derecho; pero también el gobierno.

Es difícil compartir un ideal socialista cuando los gobiernos no son capaces de asumir esos principios. El gobierno revolucionario de Venezuela carece, al menos en general, de una propuesta socialista y democrática efectiva que permita la convivencia entre las diferentes opciones políticas. En cambio, aceptan aquellos modelos económicos que se someten a la actitud soberbia de quienes consideran tener la verdad absoluta.

La propuesta bolivariana implicaba la liberación del país de un imperio liderado desde Estados Unidos; pero, poco se cuestiona del acercamiento a los imperios de Rusia o China. ¿Estos últimos son mejores socios? ¿No exportan también una ideología? Existe una izquierda arcaica que mantiene la idea de una conspiración en cualquier acción de los Estados Unidos pero en el siglo XXI la defensa de los intereses nacionales tiene que madurar en concordancia con las nuevas realidades de la globalización.

Debemos defender nuestra identidad pero elevando nuestra calidad de vida, erradicando la corrupción, disminuyendo la marginalidad, invirtiendo en educación, salud e infraestructura. No recurriendo a los pobres para mantener ideológicamente un sistema político que beneficia a unos pocos; a los que como siempre, se pliegan al poder de turno. UNASUR y el ALBA son escenarios estupendos para una integración que nos permita crecer y defendernos como región.

Vivimos en un ideal socialista fundamentado en medias verdades y en unos ingresos petroleros que nos han transformado en peones útiles para el sostenimiento económico y políticos de algunos países. ¿Cuándo llegará la hora de invertir en Venezuela? En los cambios que requerimos como sociedad.

ETA y Venezuela

Por Víctor Manuel Pérez Martínez victor@vmperezm.com

El tema del terrorismo es complejo, peligroso y políticamente preocupante si no existe la voluntad de asumir que la violencia no es la vía para lograr los objetivos en una democracia. Es una actividad que genera muerte, miedo y resentimientos. La sociedad venezolana no tiene la experiencia de convivir con movimientos terroristas. Incluso, los políticos venezolanos tienen poca experiencia en el manejo de estos temas y la imprudencia no es una buena consejera.

La defensa de ideales políticos a través de la fuerza no es coherente con la libertad, la paz y la igualdad. Ignoramos las repercusiones que el terrorismo tiene en la vida de los ciudadanos, en las relaciones con otros países y en la democracia como sistema político. Los venezolanos hemos trabajado, y seguimos en el mismo camino, por una democracia donde prevalezca el entendimiento; sería ilógico otro sistema. A pesar de las dificultades, en gran parte por la actuación negativa de algunos gobernantes (nacionales y regionales), la democracia es el sistema que nos permite mayor libertad y seguridad. Es evidente, que la corrupción, la incompetencia, el abuso de poder, el control político, la falta de pluralismo están afectando nuestra convivencia política. Por lo pronto, el voto es una herramienta formal que permite hacer cambios en el rumbo político.

Las relaciones entre los gobiernos de Venezuela y España se han mantenido cordiales; en la medida que los intereses económicos de ambos países sean el punto de encuentro de las negociaciones. Ahora bien, en los temas donde la banda terrorista española ETA aparece, hay una actitud muy clara en el Estado español: el rechazo de todas las fuerzas políticas. En pocos asuntos los partidos españoles logran acuerdos unísonos; pero, en la lucha terrorista no hay ningún atisbo de duda. En este proceso, todas las instituciones tienen el objetivo muy bien definido.

En los países donde la separación de los poderes está claramente definida, a pesar de sus dificultades, el respeto a las instituciones democráticas no se cuestiona. Es lógico pensar que en la estructura del gobierno bolivariano este tipo de principio democrático sea inconcebible. En los poderes públicos venezolanos no se cuestiona ninguna decisión del presidente. Es un aspecto sobre el cual reflexionar en un sistema que se considera democrático y defensor del socialismo. Los grupos terroristas no son buenos aliados para construir una democracia. Los poderes políticos y las fuerzas de seguridad del Estado venezolano, deben velar para evitar cualquier infiltración de integrantes de grupos terroristas en la vida política venezolana. En estos casos, la justicia es quien debe decidir.

Es hora de gobernar

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

La insistencia de convocar un referéndum revocatorio es una estrategia del gobierno para desviar la atención de la opinión pública de los graves problemas que están afectando al país. Un referéndum permitiría activar oficialmente una maquinaria electoral ofreciéndole oxígeno a un gobierno que ha demostrado en los últimos meses la incompetencia en la gerencia de asuntos claves para el país. Por otra parte, aunque la oposición viene asumiendo un papel diferente, todavía no comprende sus líderes la necesidad de establecer estrategias que permitan fortalecer la unidad entre sus integrantes.

La violencia entre seguidores del oficialismo y de la oposición retoma las calles de las ciudades venezolanas. El movimiento estudiantil vuelve a estar presente y la pregunta que nos podemos hacer es, ¿tiene sentido el esfuerzo que están realizando? Las acciones del gobierno, en un marco legal, con la intención de controlar las voces que disienten de la política oficial han generado las movilizaciones en el país. No es únicamente un tema vinculado a RCTVI (Radio Caracas Televisión Internacional); es una estrategia relacionada con una política muy concreta de fortalecer los mensajes de la revolución sin que existan críticas a su gobierno.

El salvajismo de grupos delictivos amenazando cualquier acción de protesta al gobierno no es políticamente adecuado para ninguna de las partes involucradas. La tensión política entre los venezolanos debe tener canales democráticos para llegar a los acuerdos mínimos donde el respeto y la convivencia sean los elementos mínimos para el diálogo.

En estos momentos el oficialismo no puede pretender seguir esgrimiendo excusas de su incompetencia apelando a los gobiernos anteriores. Es una década de revolución bolivariana donde los resultados en bienestar social y en democracia han sido mínimos con respecto a los ingresos recibidos. Venezuela necesita un gobierno con capacidad de gestionar los problemas estructurales que diariamente se están agravando con más velocidad.

Es la hora de gobernar o permitir un cambio de rumbo en la dirección política y económica del país. Es necesario exigir responsabilidades por los actos de corrupción que han ocurrido. Las elecciones son el mecanismo formal de la democracia para pedir se cumplan nuestros derechos. Ahora bien, quizás la etapa de transición a un nuevo modelo político ha llegado a su final y es el momento de plantearse uno nuevo; en democracia

Llegó la devaluación

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

La devaluación de la moneda, tan esperada desde hace algún tiempo, fue anunciada por el presidente Hugo Chávez. El aviso fue estratégicamente a principios del nuevo año, cuando la sociedad todavía está entusiasmada por las fiestas navideñas y esperábamos que el nuevo año llegara con nuevos signos de esperanza y de mejora para el país. Pero, este tipo de acciones no cambian aunque los gobiernos sean distintos. En cualquier caso, hemos comenzado el año con una devaluación, con el poder adquisitivo del bolívar cada vez menor y con una incertidumbre mayor sobre las nuevas medidas económicas que podrían ser aprobadas.

A principios del año 2009, Hugo Chávez en declaraciones a CNN, indicó que no había necesidad de realizar una devaluación del bolívar porque las condiciones eran ideales en la economía venezolana. ¿Qué pasó en el 2009 para que en menos de un año cambiara la economía en nuestro país? Algunos expertos señalan que la devaluación de la moneda era un mal necesario; incluso, hay quienes consideran que la devaluación todavía es mayor.

La medida se ha recibido en el sector económico con una percepción positiva; pero, la incertidumbre no está tanto en las consecuencias de la devaluación como en los procedimientos que se utilizarán para hacer viable la misma. Las estructuras responsables de controlar la moneda en Venezuela tienen el reto de minimizar la corrupción que puede generar mantener dos tipos de cambios; suministrar las divisas solicitadas sin parcializaciones políticas y evitar que la devaluación no se transforme en una inflación incontrolada para la economía del venezolano.

Las nuevas medidas económicas son el reflejo de un gobierno que evita, por aspectos políticos, tomar decisiones prioritarias y administrar los recursos del país de forma eficiente y eficaz. Han sido medidas que llegan con demora por el miedo a la pérdida de popularidad por las consecuencias políticas para el gobierno revolucionario. Ahora bien, ¿cuándo podrá Venezuela disfrutar de una economía sana y fuerte? Venezuela ya no está recibiendo los recursos esperados por el petróleo. Seguimos manteniendo el mismo modelo productivo y consolidamos una estructura rentista. La revolución bolivariana necesita más dinero. Existe una burbuja irreal que se refleja en el gasto público, en el consumismo o en la especulación de ciertos sectores.

El modelo socialista del gobierno actual promueve principios o acciones que no responden a los intereses de la mayoría de la población venezolana; incluyendo a quienes señalan apoyar al presidente. Y no nos referimos al tema social, aspecto en el cual la mayoría de la población coincidimos como importante para el país. Venezuela no es Cuba; es una sociedad distinta. Venezuela no es una hacienda; es un país con personas interesadas en alcanzar objetivos distintos al del gobierno.

Venezuela no es un cuartel; en una sociedad civil que piensa y desea vivir en libertad. Venezuela no es un partido político; es una pluralidad de intereses en donde la mayoría desea construir y promover la paz del país.

¿Estamos en guerra?

¿Estamos en guerra?

Por Víctor Manuel Pérez Martínez
victor@vmperezm.com

¿Estamos en guerra? Sin lugar a dudas: estamos en guerra. ¿Cuántas muertes semanales ocurren por la violencia en nuestro país? La guerra no es con Colombia ni con los Estados Unidos. Nuestra guerra está en las calles y en los barrios de nuestras ciudades. Las muertes, los secuestros o los atracos ocurren en las puertas de nuestras casas. No tenemos fuerzas policiales, judiciales ni militares con las capacidades estratégicas para mantener a los criminales en las cárceles; pero, ¿estamos pensando en un conflicto internacional?

La presencia de tropas americanas en Colombia no es del agrado de un porcentaje significativo de venezolanos que consideramos otras estrategias más acordes con la región para controlar el narcotráfico; pero, es una realidad que quienes no aceptan el socialismo del gobierno actual se les hace difícil encontrar un espacio para la coordinación de proyectos. Ahora bien, ¿tiene sentido una guerra entre Colombia y Venezuela? ¿Será una estrategia de ambos gobiernos para ocultar los problemas internos? ¿La diplomacia entre ambos países no tiene canales de diálogo adecuados para discutir estos temas alejados de los micrófonos? ¿Por qué no se insultan en una oficina y dejan a los ciudadanos vivir en paz?

En nuestro país hay un gobierno y una oposición intolerante con otras alternativas políticas. Existe miedo de expresar públicamente una opinión contraria al gobierno, o a favor, porque se castiga con violencia (no necesariamente física). ¿Es preferible el silencio y esperar a ver que ocurre? Lamentablemente la solución no vendrá simplemente con desearlo; hay que trabajar por el cambio.

La violencia en nuestras calles no se soluciona con buenas intenciones o declaraciones populistas.Es necesario voluntad política para erradicar las armas, las drogas y las mafias de nuestros barrios. Pero, ¿cuál de los políticos actuales viven en un barrio? Es obligatorio precisar que la delincuencia es un problema que existió en gobiernos anteriores; pero, después de diez años de revolución socialista y de interés por defender al pueblo de las invasiones extranjeras, es inmoral que no se tomaran medidas más efectivas contra la delincuencia. Sin embargo, oposición y gobierno siguen gastando tiempo en declaraciones absurdas sobre el tema. Menos palabras y más acciones contundentes. Hemos sido invadidos por la ignorancia, las drogas, las armas y una delincuencia que está haciendo sufrir a los venezolanos. Somos quienes votamos y decidimos: no lo olviden. Podemos optar libremente por un nuevo cambio.

I Congreso Internacional Latina de Comunicación Social

I Congreso Internacional Latina de Comunicación Social
Postperiodismo: la información, en la sociedad saturada
Tenerife [miércoles 9 - 12 de diciembre de 2009]

Organizan:* Sociedad Latina de Comunicación Socia; LAboratorio de Tecnologías de la Información y Nuevos Análisis (LATINA) de Comunicación (Equipo de Investigación registrado en la Universidad de La Laguna). Colaboran: Vicerrectorado de I+D+i de la Universidad de La Laguna; Facultad y Departamento de Ciencias de la Información - Universidad de La Laguna, sede del congreso

Líneas de trabajo del congreso:

El congreso se organiza sobre tres líneas preferentes, aunque admite contribuciones referidas a trabajos de investigación en el ámbito de la Comunicación y las Ciencias Sociales.

Tema central: Postperiodismo: la información, en la sociedad saturada

Mesas

Mesa número 1: Postperiodismo: diagnósticos para una crisis

  • Estudios sobre estructuras empresariales y alternativas del Periodismo.

  • Investigaciones y análisis sobre factores que han puesto en crisis el Periodismo.

  • Perspectiva evolutiva del Periodismo y las empresas y medios de información.

  • ¿Sigue existiendo medios de calidad y referencia?

  • ¿Hacia dónde van los medios públicos?

  • ¿Nos llevan a una mayor concentración de medios privados?

Mesa número 2: Periodismo directo: las fuentes hacen periodismo, las audiencias hacen información

  • Investigaciones sobre la proliferación editorial de las fuentes informativas, especialmente mediante las herramientas de las nuevas tecnologías y la red.

  • Estudios sobre periodismo ciudadano, participación ciudadana en la información, nuevas fórmulas periodísticas y nuevos medios.

  • ¿Qué ha sido del periodismo de investigación?

  • ¿La prensa convencional conoce sus vicios?

Mesa número 3: La posUniversidad europea: Bolonia, ¿principio o fin? La formación de comunicadores en América Latina y España

  • Investigaciones sobre el modelo formativo de los futuros periodistas, comunicadores, gestores de información y creadores de contenidos.

  • Análisis sobre el papel de los profesionales de la comunicación en la actividad docente e investigadora de la Universidad.

  • Estudios y análisis críticos sobre las prácticas en empresas de los estudiantes de Periodismo y Comunicación.

  • Bolonia, en los medios, ¿con qué calidad se ha informado?

Más información en:
http://www.revistalatinacs.org/09/Sociedad/convocatoria_congreso.html

Viejos y nuevos muros

Viejos y nuevos muros

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

El muro de Berlín ya no existe. Veinte años de su demolición han permitido una nueva visión de Alemania y de Europa. Fue un signo de opresión, de intolerancia y reminiscencia de la guerra fría. El 9 de noviembre de 1989 fue una fecha para la libertad muy importante. El odio y la guerra quedaban atrás para abrir un nuevo escenario de paz. La reunificación de Alemania era posible, una vez se dejaran atrás los años de odios que tanto daño causó a la sociedad alemana. Por eso, la destrucción del muro de Berlín fue un signo de libertad y de esperanza.

No obstante, siguen existiendo muros que esperan algún día su destrucción. Los gobiernos lo utilizan como alternativas para controlar sus fronteras; pero, en el siglo XXI, se espera que la diplomacia permita superar estos mecanismos de separación. Hay muros que siguen recordando la intolerancia como las “líneas de la paz” en Irlanda del Norte, que separaban a católicos y protestantes. Marruecos tiene su “muro de la vergüenza” para mantener distante al Frente Polisario. Arabia Saudita quiere un reino fortificado. Brasil mantener alejados de la “ciudad moderna”  a los pobladores y narcotraficantes de las favelas. Podemos incluir las vallas que limitan la frontera de la India y Pakistán o la de Kuwait e Irak. ¿Algún día podrá destruirse el muro entre Israel y Cisjordania? Pero, ¿qué decimos del muro entre México y los Estados Unidos para evitar el paso de la inmigración ilegal? Caso similar en España y sus vallas en las fronteras con Marruecos.

Los muros separan los países, mientras que las realidades de los pueblos siguen viviendo su cotidianidad en busca de esperanzas que le permitan mejorar su calidad de vida. Ahora bien, los muros físicos podrán destruirse; pero los otros muros, como las diferencias económicas, la pobreza o la falta de recursos básicos para la supervivencia son más complejos de destruir. ¿El bloqueo económico a Cuba no es un muro ilógico, ilegal e incoherente con el espíritu actual de la sociedad mundial? ¿Y los nuevos muros económicos? Algunos gobiernos consideran que las barreras ayudan a solucionar los problemas y suele ocurrir casi siempre que los empeoran. Las relaciones con los países fronterizos no tienen porque ser conflictivos, siempre y cuando exista voluntad política de buscar soluciones. No es un problema que quieran los ciudadanos en general; es un tema de quienes quieren ejercer su poder.

En estas semanas hemos vivido el cierre de las fronteras entre Colombia y Venezuela. Las relaciones diplomáticas no están en su mejor nivel. Hugo Chávez apuesta por la movilización de soldados; Alvaro Uribe por mantenerse alejado de la provocación y no construir un “muro de Berlín”. El planteamiento central es ¿están dispuestos a ceder en sus posturas en beneficio del pueblo colombiano y venezolano? Por lo pronto esperamos que el muro verbal no se transforme en hormigón.

¡Firmes!

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

¡Firmes! Al buen estilo militar bolivariano, los venezolanos no tenemos otra opción en un autoritarismo enmascarado con una democracia al estilo de Hugo Chávez y su equipo de gobierno. Obviamente, gracias a una oposición que sueña todavía en retomar el poder a cualquier precio. ¿Delante de quién nos ponemos firmes, presentamos armas y mantenemos la línea recta? Por lo pronto, y considerando que los militares son quienes tienen las armas y el poder, ¿a quién presentaría usted las armas?

La “Ley orgánica de la Fuerza Armada Nacional y Bolivariana” y la “Ley de Conscripción y Alistamiento Militar” (texto que deberíamos leer en su totalidad) nos dejan poca opciones de maniobra a quienes defendemos la paz y la convivencia ciudadana alejada de los regímenes militares que tanto daño han hecho a nuestros países latinoamericanos. Es utópico pensar que en un país se creen milicias y se fortalezcan las fuerzas militares por razones de paz. Organizar milicias y otorgarles más poderes y recursos legales o económicos a las instancias militares es para tener capacidad de respuesta ante un conflicto. ¿Es que vamos a seguir el estilo de discurso promulgado por algunas administraciones de la Casa Blanca? Los países se arman para una guerra; no para buscar la paz.

Ahora bien, si en Venezuela no hay indicios de ningún tipo de conflicto bélico, excepto aquellos en los cuales el gobierno venezolano sueña, ¿por qué debemos rescatar el servicio militar obligatorio, crear milicias y mantener a los ciudadanos controlados con respecto a su participación o no en una estructura militar? La esperanza es que no deje de ser una forma de intimidación hacia los venezolanos como estrategia electoral; quizás una forma muy sutil de controlar el grado de aceptación hacia la revolución bolivariana. Si estas no fueran las razones, ¿estaremos cerca de una invasión o será nuestro gobierno el causante de la misma? Es difícil entender entre quienes apoyan al presidente Hugo Chávez y a su gobierno, que defiendan un sistema político que pretende con más insistencia controlarnos la vida. Estamos hipotecando la paz y la vida de las futuras generaciones en proyectos absurdos que están beneficiando únicamente a quienes están en el poder. Tenemos un gobierno que desea la confrontación, la guerra y la defensa de unos principios a cualquier precio; pero, con el agravante que esos principios ni los defienden, ni los asumen, ni los respetan aquellos que dicen defenderlos.

El negocio de la guerra es muy lucrativo para quienes la dirigen. Los conflictos solamente benefician a quienes controlan el poder. La historia nos dice que las secuelas de los conflictos armados, la violencia y la muerte no ayudan a la humanidad ni a las ideas. Un debate es la defensa de la soberanía y otra cosa es jugar a exponer nuestra soberanía y la vida de nuestros ciudadanos. El uniforme y el mundo militar son apetecibles, cautivantes y atrayentes. Pero, los conflictos armados son otra cosa.

¿Cambio en el Gobierno?

Por Víctor Manuel Pérez Martínez

El término reestructurar significa modificar y creo no equivocarme al señalar, que el objetivo de una modificación es con la finalidad de evaluar, planificar y alcanzar los objetivos no logrados o plantearse otros más adecuados. Es decir, la reestructuración de un gobierno tiene que ser coherente con las necesidades y exigencias de un momento determinado. Si el presidente de un gobierno tiene que hacer cambios en sus ministros es porque tiene un proyecto. Por eso, ¿cuáles son los objetivos del gobierno? Un nuevo equipo u estructura con criterios más gerenciales y enfocados a una visión de gestión democrática es inviable en la mentalidad del presidente. Es obvio, hay un interés político que prevalece por encima de las necesidades reales de los ciudadanos. Al menos esa es mi interpretación de sus palabras: "Hemos comenzado una reestructuración del Gobierno para darle mayor cohesión y convertir al Consejo de Ministros en un ente político, no meramente administrativo". Personalmente, prefiero un ente con un proyecto democrático de país que busque soluciones efectivas y permanentes a los problemas de los venezolanos.

Una estructura de gobierno más burocrático, con seis vicepresidentes, un Consejo Presidencial de Ministros, un Secretario Permanente del Consejo de Ministros, un Consejo de Mesa. Estupendo, hay una nueva estructura con personas seguramente conocidas por el apoyo reverencial hacia la figura de Hugo Chávez. ¿Quién de ellos le diría “no” a alguna de sus ideas? Pero, ¿y los equipos de profesionales, técnicos e investigadores para solucionar los problemas de los ciudadanos? ¿La estrategia para supervisar los cargos públicos para reducir la corrupción? ¿Conocer los gastos de los representantes de los ciudadanos? Se nos olvidaba que tendremos un relanzamiento de las misiones sociales. Estupendo porque, en definitiva, los más necesitados recibirán algunos de los recursos que están sobrando de la cantidad inmensa que se reparten en los círculos vinculados con el poder. Nos olvidamos que el dinero destinado a estos proyectos no es un regalo del gobierno; es el derecho de los ciudadanos menos favorecidos. Una obligación del gobierno de administrar con transparencia los impuestos y recursos de los venezolanos.

Pero, mientras seguimos en campaña electoral (oposición-gobierno), no hay interés en ofrecer una educación que genere una actitud crítica ante el gobierno y los sectores políticos. Es fundamental seguir inculcando una ideología al estilo del presidente en las futuras generaciones. ¡Es estupendo hablar de socialismo con todos nuestros impuestos y recursos a disposición de quienes tienen el poder! ¿Quién dejaría de ser socialista teniendo tantos recursos, influencia y poder?

 

 

Uribe vs Chávez

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

Es evidente que las relaciones entre Álvaro Uribe y Hugo Chávez no son cordiales. Al menos parecen una montaña rusa: nunca se sabe si están en subida o en bajada. En cualquier caso, los gobiernos que representan no comparten los mismos ideales; pero, los ciudadanos queremos paz, seguridad y trabajo, no discusiones ideológicas sobre temas que deberían resolverse a la altura de los pueblos que los eligieron. En fin… son cosas de la política.

La guerrilla es uno de los problemas con los cuales Colombia debe convivir. Desde Venezuela no parece que tengamos conciencia de que también es un problema de los venezolanos, por la cantidad de kilómetros de frontera que compartimos. Es preocupante la guerrilla; pero, se agrava, cuando los dos gobiernos no son capaces de elaborar estrategias comunes para enfrentar a los grupos guerrilleros. Es decir, prefieren la diplomacia del micrófono antes de reunirse privadamente para aportar soluciones concretas.

El Gobierno de Venezuela reclama la posible instalación de bases estadounidenses en territorio colombiano; pero, ¿cuándo podríamos pensar en una fuerza militar integrada por los países de América Latina para cumplir con el objetivo de erradicar la guerrilla o el narcotráfico? Es posible, que a pesar de los discursos de integración, los propios gobiernos de América Latina no confíen plenamente uno del otro; al menos, no al nivel para organizar una fuerza de seguridad eficaz.

El hecho de que existan armas incautadas a la guerrilla colombiana provenientes de Venezuela es preocupante; pero, desde una perspectiva estratégica, Venezuela es un país fronterizo y hay cierta lógica de que los guerrilleros busquen obtener armas por esta vía. La gravedad del hecho, desde mi perspectiva, es que el Gobierno colombiano no realizara un acercamiento diplomático previo y gestionara con las autoridades venezolanas las investigaciones relacionadas con el caso. El hecho era una oportunidad para crear una comisión de investigación entre los dos países y ubicar responsables: ¿es tan ilógica la idea?

Al margen de este debate, ¿era indispensable romper las relaciones con el gobierno de Colombia? ¿Dónde están las estrategias de la diplomacia moderna para solucionar los conflictos entre los gobiernos? El tema de la guerrilla y de las relaciones Colombia-Venezuela es delicado y lo que menos le conviene a ambos países es distanciarse por falta de voluntad política y de visión de los problemas que les afectan.

No es el momento de discutir interpretaciones sobre la presencia estadounidense y de sus supuestos planes de invasión. La realidad es que la guerrilla está entre los dos países, existen armas que se están vendiendo y el narcotráfico es un elemento clave en este contexto. La esperanza es que mientras ambos presidentes se enfrentan para defender una idea, existan en otros niveles autoridades, funcionarios y militares que estén buscando estrategias conjuntas para enfrentar a los guerrilleros, investigar los hechos ocurridos y elaborar planes de seguridad que permitan minimizar la actividad guerrillera en ambos países, especialmente en la frontera.

Honduras: entre la paz y la violencia

Por Víctor Manuel Pérez Martínez / victor@vmperezm.com

Honduras se juega su futuro teniendo que decidir entre la democracia, la guerra civil, la dictadura o algún sistema político que permita la paz social, al menos en algún período de tiempo. Pero, detrás del conflicto hondureño está, de alguna manera representado, las características de la vida política de gran parte de las naciones latinoamericanas. Es decir, sistemas políticos débiles democráticamente, no por la realización de elecciones sino por la ausencia de ámbitos plurales de decisiones, opiniones y actuaciones políticas; la pobreza, que determina las esperanzas y las creencias de una sociedad; el control del mundo militar en las decisiones civiles; la influencia solapada de ideologías de extrema izquierda y de extrema derecha y, entre otros aspectos, la presencia en el poder de políticos que negocian con la política.

La tranquilidad centroamericana se ve empañada por una posible guerra civil; las amenazas militares; las sanciones de la OEA; el cuestionamiento prácticamente de todos los gobiernos que mantienen relaciones con Honduras; y, una suerte de incertidumbre que puede traer consecuencias políticas graves para la región porque, los hechos que ocurren en Honduras pueden ser un precedente en otros países.

¿Había razones para destituir a Manuel Zelaya?  Ahora bien, ¿por qué no se respetó la legalidad y la constitucionalidad para su destitución por la vía democrática? En general, todos quienes promueven un golpe de estado lo defienden; pero, en cualquier caso, en el contexto de la vida política actual, es un hecho condenable para mantener la paz social y la convivencia internacional. Nadie justifica la actuación de Manual Zelaya en su gobierno; pero, no por eso, la fuerza militar y la violencia debe ser la salida a los problemas

Hoy las preguntas son: ¿A quién se debe apoyar? ¿Cómo relacionarse con un gobierno no electo a través de elecciones libres? ¿Cuáles son los objetivos de Roberto Micheletti? ¿Puede permitirse que la opción de los golpes de estado establezca la forma de alternancia en los gobiernos? Es un problema de los hondureños; pero, no podemos olvidar que las relaciones internacionales crean interacciones difíciles de evaluar a corto tiempo y que en los procesos políticos hay asuntos que el común de los mortales ignoramos.

La otra cara del caso de Honduras son los cambios de discursos que se han generado en algunos gobiernos de la región. Estados Unidos se ha mantenido expectante manteniendo su apoyo a la OEA; Hugo Chávez mencionó la posibilidad del uso de la Fuerza Armada; algunos obispos en Honduras asumen un rol político muy cuestionable en relación con lo que se espera de ellos… en definitiva, ¿quién dice la verdad? ¿Cuáles son los intereses políticos que están en juego en estos momentos? Sobre lo que no hay duda, al menos con los datos que manejamos, que un grupo de políticos hondureños ha desencadenado una crisis local con proyección internacional. Una crisis que podía haber tenido solución simplemente interesándose por sus ciudadanos y dejándolos manifestar libremente su opinión.

Sobre Irán

Sobre Irán

Por Víctor Manuel Pérez Martínez

Irán es y seguirá siendo noticia. Los medios de comunicación social han desplegado recursos con el objetivo de informar sobre las supuestas irregularidades ocurridas en el proceso electoral y por las acciones que el gobierno y la oposición están asumiendo ante este conflicto interno. Pero, es de suponer que en el contexto actual de Irán la veracidad y la objetividad informativa son características muy complejas de mantener. Ante esta circunstancia, solamente el acceso a diferentes fuentes informativas nos permitirán tener una visión más plural de los hechos.

Dos perspectivas iniciales. En el ámbito del propio Irán, el Consejo de Guardianes (instancia responsable de valorar el proceso electoral) han identificado irregularidades aunque mantienen que no afectan los resultados finales. Es decir, Mahmud Ahmadineyad, el actual presidente tiene que asumir un gobierno enturbiado por los rumores de fraude ante una oposición abanderada por Mir Hosein Musaví que propone cambios en la vida política de Irán.

Los procesos políticos que han ocurrido en Irán solamente pueden ser analizados en el contexto de su realidad política y social. Es una cultura particular con valores propios. Si se llegara a producir cambios es porque sus ciudadanos están en la búsqueda de nuevas circunstancias que le permitan una sociedad más acorde a sus necesidades. Ahora bien, es una decisión que deben tomar los propios ciudadanos de Irán. Por otra parte, es un país estratégico en el contexto internacional por su ubicación en el Oriente Medio. Pero, también es clave por sus recursos, por las relaciones internacionales que ha establecido con otros países y en especial con América Latina. Aunque, el tema abierto más significativo para Europa y Estados Unidos es el uso de la energía nuclear.

En este contexto, ¿cuáles son los límites para que las opiniones de otros gobiernos sean considerados una intromisión? Apoyar sin restricciones al gobierno actual puede ser reconocer en alguna medida las irregularidades cometidas aunque, en este caso en particular, la estructura política del país establece la legalidad del proceso. Rechazarlo, es ignorar la capacidad de esa estructura política de solucionar sus problemas; y, mantenerse neutral, es ser un simple observador de una violencia política que puede aumentar y en la cuál, en los tiempos que corren, sería difícil ocultar.

Ahora bien, es sensato asumir que la comunidad internacional debe denunciar y protestar por la violencia y la defensa de los derechos humanos porque somos integrantes de una comunidad internacional, que aspira establecer parámetros de convivencia con la intención de promover la igualdad del hombre. En una sociedad globalizada son pocas las expresiones que pueden ser ignoradas a pesar del interés de ciertos sectores de silenciar a los medios de comunicación. En Irán se abre un nueva etapa política de interés internacional y su estabilidad política es esencial para la paz en la región.

La Revista Latina de Comunicación Social de la ULL

La Revista Latina de Comunicación Social (RLCS) de la Universidad de La Laguna se acaba de colocar en el primer lugar en la reciente actualización del índice de impacto acumulativo 2003 – 2008 del IN-RECS, Índice de Impacto de las Revistas Españolas de Ciencias Sociales y Comunicación. Este baremo lo elabora cada año el Grupo de Investigación EC3: Evaluación de la Ciencia y de la Comunicación Científica, de la Universidad de Granada, entre veinticinco revistas científicas españolas dedicadas a este área de conocimiento. Es la primera vez que una revista de la institución tinerfeña logra este puesto.

RLCS, dirigida por el catedrático de Periodismo José Manuel de Pablos Coello, figura en la primera posición, con 64 citas y 135 artículos publicados, lo que origina un índice de 0,5 citas por artículo. Las revistas científicas que logran un índice 1 son consideradas las mejores revistas mundiales de cada especialidad. La revista que ocupa la segunda posición muestra 32 citas con 126 artículos y un índice de 0,3.

Esta revista de la ULL ocupa el puesto 63 mundial, definido por un equipo de la Universidad de Barcelona por medio de la Matriu d’Informació per a l’Avaluació de Revistes, MIAR, que contempla 294 registros, la mayoría del ámbito anglosajón, más de 150 de las cuales están situadas en posiciones más bajas que la revista de La Laguna.

La revista se edita en la Facultad de Ciencias de la Información de la ULL desde 1998 y es una de las seis revistas españolas de esta especialidad declaradas “revistas fuente” o de referencia. Las otras revistas de este grupo de cabeza son las editadas en la Universidad Autónoma de Barcelona, Universidad de Pamplona, Universidad del País Vasco, Complutense de Madrid y Huelva.

Editada en Internet, es la revista de comunicación en línea decana de las españolas. Se encuentra en esta dirección: http://www.revistalatinacs.org y en esta otra url: http://www.ull.es/publicaciones/latina/.

Fuente: ULL

Ante la Gripe A

Por Víctor Manuel Pérez Martínez
victor@vmperezm.com

Hay una alerta mundial en relación a la gripe A(H1N1). Es un virus que afecta a varios países y tiene como característica principal su alto grado de transmisión entre los seres humanos con el agravante de la ausencia de vacunas eficaces. Ahora bien, aunque este nuevo virus ha puesto en alerta a todos los países del mundo, es satisfactorio saber que se han activado mecanismos de respuestas para establecer protocolos conjuntos y minimizar las posibles consecuencias. Negar que esta rápida actuación ha contribuido a retardar la expansión de la gripe sería deshonesto, en especial por quienes han podido acceder al sistema sanitario de sus respectivos países y han sido descartados o atendidos adecuadamente. Esta reflexión no excluye las mejoras o retardos en la toma de decisiones sanitarias en casos puntuales.

Por otra parte, es necesario asumir una actitud crítica ante las formas con las cuales algunos medios de comunicación social han informado a la colectividad sobre esta realidad. Hay quienes mantienen la tesis de que es la mejor forma de mantener informada a la población, pero, el debate que proponemos es que una cosa es informar y otra utilizar el sensacionalismo el cual genera una alarma social o el desinterés por el tema; en otros términos, no informa. Estamos de acuerdo que es una situación real, urgente, de interés ciudadano, pero el manejo de la información científica no puede ser transmitida con los criterios alarmistas utilizados en otros eventos.

Otra reflexión, es el interés del hecho en sí mismo. Durante varias semanas hemos leído, oído y visto constantemente noticias sobre la gripe A. La Organización Mundial de la Salud ha logrado que los laboratorios asumieran la producción de una vacuna pero existe, según la propia OMS una "falsa sensación de seguridad". En otros términos, la gripe A es noticia solamente cuando alguien muere. El debate está en ¿cómo informar a los ciudadanos sin generar una alarma innecesaria? Es también una realidad que los países o las zonas más afectadas guardan relación con la calidad del sistema sanitario, con las condiciones de higiene o con el nivel de información sobre algunas medidas básicas de limpieza o sanidad. Por otra parte, los laboratorios saben que la fabricación de una vacuna generará grandes ingresos económicos y por eso, parece razonable, que la OMS haga un llamado a la solidaridad internacional para que aquellos países más pobres puedan acceder a las vacunas.

Pero, es inevitable hacernos algunas preguntas: ¿Si no fuera por el alto grado de transmisión que puede tener la gripe se tomaría medidas similares para reducir los casos? ¿Será de interés porque este virus afecta a los países desarrollados? ¿Podrían los gobiernos asumir la misma solidaridad y dedicación ante otras enfermedades o problemas que dejan cada año miles de muertes?